jueves, 30 de enero de 2014

Mientes...

Si te toco mientes,
dices no sentir nada.
Si te toco me alejas
porque te sientes utilizada.
Si te llamo,
mientes al decir
que no extrañas
mi calor.
Si te nombro,
mientes al decir
que no es tu nombre.
Mientes porque
solo yo te
enamoro al tocarte.
Mientes y lo niegas,
porque aún me necesitas,
sufres de insomnio
si no duermo contigo.
Mientes al amar,
porque nunca amaste,
porque nunca quisiste
oírlo de mi boca.
Mentiste cuando te
toque por vez primera,
tu piel se estremeció,
tus mejillas sonrojaron,
tus ojos dilatados
me pedían más,
tu boca temblante
no supo decir nada.
Mentías al pedirme
que me fuera de tu lado,
porque tus brazos
me envolvieron
en un calor intenso,
volviste a mentir
al dejar caer tu ropa
pidiéndome que
ya no viera tu cuerpo.
Mentiste al decir
que mi cuerpo era frio
si era con lo único
que quisiste taparte
esa madrugada de frio.
Mientes de nuevo,
porque si eras fría,
porque tu corazón lo es
y tu cuerpo me
dijo todo lo contrario.
Mientes al decir lo siento,
porque sigues provocándome,
mienten tus señales
que siguen invitándome
a que insista con besarte,
mienten tus palabras
al perderse
tu no en mis labios.
Mientes otra vez,
porque me dejas
anhelante de más,
al prometerme la gloria
en miles de caricias.
Mientes con promesas
de que te iras,
porque hoy
de nuevo aceptas
que empiece con un beso. 

No hay comentarios.:

Publicar un comentario