entre visiones te siento de nuevo,
mis lagrimas ruedan al recordarlo,
mi corazón se hincha al saberte cerca.
En esos sueños eres igual de hermosa,
a veces me platicas sonriente,
anoche me reprimías por mis acciones
y hoy tuve necesidad de escribirte.
Añoro tu presencia como siempre,
tus besos amorosos y abrazo protector,
tu contagiosa sonrisa, tan característica,
y esa alegría infinita que te caracterizaba.
Puede que ya no puedas leer esto,
pero te llevo siempre en mi memoria
y mi corazón se hincha de pensarte,
el sentimiento lo he de plasmar.
Hoy y siempre vivirás en tus hijos,
si pudieras vernos, seriamos felices también,
tus hijos son hombres de bien,
por qué así lo quisiste y así nos educaste.
¡Adonde vallas, siempre estaré pensándote,
donde pueda verte, lo estaré añorando siempre!
No hay comentarios.:
Publicar un comentario